martes, 7 de diciembre de 2010

Plagas y Enfermedades


-TRIPS (Frankliniella occidentalis)
Se trata de una de las plagas que causa mayor daño al cultivo de la lechuga, pues es transmisora del virus del bronceado del tomate (TSWV). La importancia de estos daños directos (ocasionados por las picaduras y las hendiduras de puestas) depende del nivel poblacional del insecto (aumentando desde mediada la primavera hasta bien entrado el otoño).

Normalmente el principal daño que ocasiona al cultivo no es el directo sino el indirecto transmitiendo el virus TSWV. La presencia de este virus en las plantas empieza por provocar grandes necrosis foliares, y rápidamente éstas acaban muriendo.

-Agente causal y ciclo de vida.

El adulto de Frankliniella occidentalis mide de 1-1.5 mm. de longitud, es alargado y con color variable desde blanco-amarillento a marrón, siendo más oscuro en invierno y más claro en verano. Los huevos de 0.2 mm. de tamaño se localizan debajo del tejido vegetal, por tanto no son visibles a simple vista. Las larvas son ápteras y las ninfas no se alimentan y son poco móviles.
Esta plaga se encuentra también en las malas hierbas localizadas en los márgenes del cultivo.

-Lucha biológica.

Sobre diferentes cultivos se localizan de manera espontánea algunos artrópodos depredadores de F. occidentalis, destacando un insecto del género Orius y los ácaros del grupo de los Fitoseidos. Resulta efectivo plantar en los márgenes de la parcela algunas plantas por la que estos insectos muestran una especial predilección, como es el caso de las habas o alcachofas.

-Métodos culturales.

Evitar el uso de material vegetal contaminado, desplazar los cultivos de lechuga en el tiempo para no coincidir, fundamentalmente en las primeras fases vegetativas, con poblaciones altas de trips y eliminar las malas hierbas y restos vegetales antes de la plantación.
En invernaderos colocar mallas para evitar la entrada de trips y colocar también trampas para detectar la presencia de los primeros individuos.
 
-Lucha química.


Las formas de aplicación de los productos (espolvoreo y pulverización) se deberán alternar para lograr mayor eficacia. En invernadero se recomienda la termonebulización.

Si las poblaciones de trips son muy elevadas, será necesario realizar dos tratamientos en el plazo de 5 días para romper el ciclo, teniendo en cuenta que las fases de huevo y ninfa no van a ser afectadas por el primer tratamiento y necesitan unos días para emerger.

Entre las materias activas recomendadas destacan: Metiocarb, Formetanato, Fenitrotion y Lindano. 

-MINADORES (Liriomyza trifolii y Liriomyza huidobrensis)
Forman galerías en las hojas y si el ataque de la plaga es muy fuerte la planta queda debilitada.

Los tratamientos comenzarán cuando se observen los primeros síntomas, procurando mojar bien toda la superficie de la planta; siendo las siguientes materias activas las recomendadas:

MATERIA ACTIVA
DOSIS
PRESENTACIÓN DEL PRODUCTO
Abamectina 1.8%
0.05-0.10%
Concentrado emulsionable
Abamectina 3.37%
0.03-0.05%
Concentrado emulsionable
Metidation 30% + Piridafention 20%
0.02-0.04%
Concentrado emulsionable

-MOSCA BLANCA (Trialeurodes vaporariorum).
Produce una melaza que deteriora las hojas, dando lugar a un debilitamiento general de la planta.
Los tratamientos químicos comenzarán una vez que la población de mosca blanca vaya incrementándose, siendo recomendables las siguientes materias activas:

MATERIA ACTIVA
DOSIS
PRESENTACIÓN DEL PRODUCTO
Alfa cipermetrin 5%
0.06-0.08%
Concentrado emulsionable
Imidacloprid 20%
0.05-0.08%
Concentrado soluble

-PULGONES (Myzus persicae, Macrosiphum solani y Narsonovia ribisnigri)
Se trata de una plaga sistemática en el cultivo de la lechuga, siendo su incidencia variable según las condiciones climáticas.

El ataque de los pulgones suele ocurrir cuando el cultivo está próximo a la recolección. Aunque si la planta es joven, y el ataque es considerable, puede arrasar el cultivo, además de ser entrada de alguna virosis que haga inviable el cultivo.

Los pulgones colonizan las plantas desde las hojas exteriores y avanzando hasta el interior, excepto la especie Narsonovia ribisnigri, cuya difusión es centrífuga, es decir, su colonización comienza en las hojas interiores, multiplicándose progresivamente y trasladándose después a las partes exteriores.

A continuación se muestran las materias activas recomendadas para el control de pulgones:

MATERIA ACTIVA 
DOSIS 
PRESENTACIÓN DEL PRODUCTO
Acefato 75%
0.05%
Polvo soluble en agua
Alfa cipermetrin 4%
0.08-0.10%
Concentrado emulsionable
Cipermetrin 2% + Metil pirifos 25%
0.20-0.25%
Concentrado emulsionable
Deltametrin 2.5% + Heptenofos 40%
0.05%
Concentrado emulsionable
Imidacloprid 20%
0.05-0.08%
Concentrado soluble
Lambda cihalotrin 2.5%
0.04-0.08%
Concentrado emulsionable
Permetrin 25%
0.02-0.04%
Concentrado emulsionable
Tau-fluvalinato 24%
0.02-0.04%
Suspensión concentrada

Enfermedades.

-ANTRACNOSIS (Marssonina panattoniana)
Los daños se inician con lesiones de tamaño de punta de alfiler, éstas aumentan de tamaño hasta formar manchas angulosas-circulares, de color rojo oscuro, que llegan a tener un diámetro de hasta 4 cm.

Para su control se recomienda la desinfección del suelo y de la semilla, además de tratar con alguna de las materias activas recomendadas:

MATERIA ACTIVA
DOSIS
PRESENTACIÓN DEL PRODUCTO
Captan 47.5%
0.25-0.30%
Suspensión concentrada 
Folpet 10% + Oxicloruro de cobre 11.2% + Sulfato cuprocálcico 10.4%
0.25-0.35%
Polvo mojable
Folpet 50%
0.25-0.30%
Microgránulo
Mancozeb 40% + Sulfato de cobre 11%
0.30%
Polvo mojable

-BOTRITIS (Botrytis cinerea)
Los síntomas comienzan en las hojas más viejas con unas manchas de aspecto húmedo que se tornan amarillas, y seguidamente se cubren de moho gris que genera enorme cantidad de esporas. Si la humedad relativa aumenta las plantas quedan cubiertas por un micelio blanco; pero si el ambiente está seco se produce una putrefacción de color pardo o negro.
Esta enfermedad se puede controlar a partir de medidas preventivas basadas en la disminución de la profundidad y densidad de plantación, además de reducir los excesos de humedad.

A continuación se muestran las materias activas eficaces y autorizadas actualmente:

MATERIA ACTIVA
DOSIS
PRESENTACIÓN
Benomilo 50%
0.10%
Polvo mojable
Captan 47.5%
0.25-0.30%
Suspensión concentrada
Cimoxanilo 4% + Folpet 40%
0.30%
Polvo mojable
Iprodiona 50%
0.10-0.15%
Suspensión concentrada
Procimidona 3%
20-30 kg/ha
Polvo para espolvoreo
Vinclozolina 50%
0.10-0.15%
Polvo mojable

-MILDIU VELLOSO (Bremia lactucae)
En el haz de las hojas aparecen unas manchas de un centímetro de diámetro, y en el envés aparece un micelio velloso; las manchas llegan a unirse unas con otras y se tornan de color pardo. Los ataques más importantes de esta plaga se suelen dar en otoño y primavera, que es cuando suelen presentarse periodos de humedad prolongada, además las conidias del hongo son transportadas por el viento dando lugar a nuevas infecciones.

Para combatir esta enfermedad se recomiendan las siguientes materias activas, teniendo en cuenta que dichas aplicaciones sobre infecciones cuyo desarrollo foliar cubre completamente el suelo tiene una eficacia limitada:

MATERIA ACTIVA 
DOSIS 
PRESENTACIÓN DEL PRODUCTO
Benalaxil 6% + Cimoxanilo 3.2% + Folpet 35%
0.23-0.33%
Polvo  mojable
Benalaxil 8% + Mancozeb 65% 
0.20-0.30%
Polvo mojable
Captan 40% + Tiabendazol 17%
0.15-0.25%
Polvo mojable
Captan 85%
0.15-0.25%
Polvo mojable
Cimoxamilo 4% + Folpet 40%
0.30%
Polvo mojable
Etirimol 6% + Maneb 40%
0.30-0.60%
Suspensión concentrada
Mancozeb 60% + Metil tiofanato 14%
2-4 l/ha
Polvo mojable
Zineb 50%
0.40%
Suspensión concentrada

-ESCLEROTINIA (Sclerotinia sclerotiorum)
Se trata de una enfermedad principalmente de suelo, por tanto las tierras nuevas están exentas de este parásito o con infecciones muy leves.
La infección se empieza a desarrollar sobre los tejidos cercanos al suelo, pues la zona del cuello de la planta es donde se inician y permanecen los ataques. Sobre la planta produce un marchitamiento lento en las hojas, iniciándose en las más viejas, y continúa hasta que toda la planta queda afectada. En el tallo aparece un micelio algodonoso que se extiende hacia arriba en el tallo principal.

Para el control de este enfermedad se recomiendan las siguientes materias activas:

MATERIA ACTIVA
DOSIS
PRESENTACIÓN DEL PRODUCTO
Captan 40% + Tiabendazol 17%
0.15-0.25%
Polvo mojable
Folpet 40% + Tiabendazol 17%
0.15-0.25%
Suspensión concentrada
Procimidona 3%
20-30 kg/ha
Polvo para espolvoreo
Vinclozolina 50%
0.10-0.15%
Suspensión concentrada

-SEPTORIOSIS (Septoria lactucae)
Esta enfermedad produce manchas en las hojas inferiores.

Se combate empleando algunas de las siguientes materias activas:

MATERIA ACTIVA 
DOSIS
PRESENTACIÓN DEL PRODUCTO
Cimoxanilo 3% + Folpet 32%+ Ofurace 6%
0.20-0.30%
Polvo mojable
Folpet 10% + Oxicloruro de cobre 11.2% + Sulfato cuprocálcico 10.4%
0.25-0.35%
Polvo mojable

-VIRUS DEL MOSAICO DE LA LECHUGA (LMV).
Es una de las principales virosis que afectan al cultivo de la lechuga, debido a los importantes daños causados. Se transmite por semilla y pulgones.

Los síntomas producidos pueden empezar incluso en semillero, presentando moteados y mosaicos verdosos que se van acentuando al crecer las plantas, dando lugar a una clorosis generalizada, en algunas variedades pueden presentar clorosis foliares.

-VIRUS DEL BRONCEADO DEL TOMATE (TSWV).

Las infecciones causadas por este virus están caracterizadas por manchas foliares, inicialmente cloróticas, y posteriormente, necróticas e irregulares, a veces tan extensas que afectan a casi toda la planta que, en general, queda enana y se marchita en poco tiempo. En los campos de lechuga la incidencia de la virosis no supera el 20-50%.

Se transmite por el trips Frankliniella occidentalis, este se nutre de las hojas, mediante un mecanismo de inyección de saliva en los tejidos vegetales seguida de vaciado por succión del contenido celular predigerido. Además de provocar heridas a las plantas con los pinchazos de alimentación.

Las relaciones del TSWV con el vector son de tipo persistente propagativo; pues la concentración del virus en el cuerpo del vector aumenta con la edad del insecto y la fecundidad disminuye en los insectos virulíferos.

 FISIOPATÍAS.

-Latencia de la semilla y mala germinación; para romper la latencia se recomienda:
  • Prerefrigeración en cámara fría (2ºC, 48 horas).
  • Pregerminación con agua (48 horas a remojo).
  • Pregerminación en cámara oscura.
  • Tratamientos con solución de giberelinas (24 horas).
-Tip burn: se manifiesta como una quemadura de las puntas de las hojas más jóvenes y se origina fundamentalmente por la falta de calcio, en los órganos en los que aparece y además por un excesivo calor, salinidad, exceso de nitrógeno y defecto de potasio, desequilibrio de riegos y escasa humedad relativa. Las hojas con las puntas quemadas dan una apariencia desagradable y el margen de la hoja dañada es más débil y susceptible a pudriciones.

-Espigado o subida de la flor: diversos factores influyen en el desarrollo del espigado: características genéticas, endurecimiento de la planta en primeros periodos de cultivo, fotoperiodos largos, elevadas temperaturas, sequía en el suelo y exceso de nitrógeno. Esta fisiopatía afecta negativamente al acogollado de la lechuga.

-Antocianos en las hojas: en época de bajas temperaturas durante el ciclo del cultivo algunas variedades son muy sensibles al enrojecimiento de sus hojas, sobre todo la lechuga tipo Trocadero.

-Escarchas en primavera: pueden dar lugar a diversas alteraciones como descamaciones epidérmicas y desecaciones. Como medida preventiva se colocan campanas de poliestireno sobre las plantas.

-Granizo: afecta negativamente tanto por el daño directo como por el indirecto, ya que sobre las heridas pueden desarrollarse patógenos secundarios, afectando a la comercialización del producto.

-Punteado pardo: es una fisiopatía común debido a la exposición a bajas concentraciones de etileno que produce depresiones oscuras especialmente en la nervadura media de las hojas. Secundariamente, el etileno estimula la producción de compuestos fenólicos que conduce a la síntesis de pigmentos pardos. Bajo condiciones severas, las manchas pueden ser encontradas en el tejido verde de las hojas y en todo el cogollo. Esta fisiopatía hace a la lechuga no comercial. La contaminación por etileno puede originarse por montacargas que trabajan o funcionan con propano, transporte de cargas mixtas, o almacenaje con frutas generadoras de etileno tales como manzanas y peras.

-Mancha parda (brown stain): los síntomas de esta fisiopatía son grandes manchas deprimidas de color amarillo rojizo principalmente en la nervadura media de las hojas. Estas pueden oscurecerse o agrandarse con el tiempo. La mancha parda en algunos casos se observa como un veteado pardo rojizo. La mancha parda es causada por la exposición a atmósferas con CO2 sobre 3%, especialmente a bajas temperaturas.

-Costilla rosada (pink rib): es una fisiopatía en la cual la nervadura de la hoja adquiere una coloración rojiza. La sobremadurez de los cogollos y el almacenaje a altas temperaturas incrementan este desorden. Las exposiciones a etileno no incrementan esta fisiopatía y atmósferas con bajo oxígeno no lo controlan.

Particularidades del Cultivo


Semillero.
La multiplicación de la lechuga suele hacerse con planta en cepellón obtenida en semillero. Se recomienda el uso de bandejas de poliestireno de 294 alveolos, sembrando en cada alveolo una semilla a 5 mm de profundidad.
Una vez transcurridos 30-40 días después de la siembra, la lechuga será plantada cuando tenga 5-6 hojas verdaderas y una altura de 8 cm., desde el cuello del tallo hasta las puntas de las hojas.
La siembra directa suele realizarse normalmente en E.E.U.U. para la producción de lechuga Iceberg.

Preparación del terreno.
En primer lugar se procederá a la nivelación del terreno, especialmente en el caso de zonas encharcadizas, seguidamente se procederá al asurcado y por último la acaballonadora, formará varios bancos, para marcar la ubicación de las plantas así como realizar pequeños surcos donde alojar la tubería portagoteros.

Se recomienda cultivar lechuga después de leguminosas, cereal o barbecho, no deben cultivarse como precedentes crucíferas o compuestas, manteniendo las parcelas libre de malas hierbas y restos del cultivo anterior. No deberán utilizarse el mismo terreno para más de dos campañas con dos cultivos a lo largo de cuatro años, salvo que se realice una sola plantación por campaña, alternando el resto del año con barbecho, cereales o leguminosas.

La desinfección química del suelo no es recomendable, ya que se trata de un cultivo de ciclo corto y muy sensible a productos químicos, pero si se recomienda utilizar la solarización en verano.

Se recomienda el acolchado durante los meses invernales empleando láminas de polietileno negro o transparente. Además también se emplean en las lechugas de pequeño tamaño y las que no forman cogollos cuyas hojas permanecen muy abiertas, para evitar que se ensucien de tierra procedentes del agua de lluvia.

 Plantación.
La plantación se realiza en caballones o en banquetas a una altura de 25 cm. para que las plantas no estén en contacto con la humedad, además de evitar los ataques producidos por hongos.
La plantación debe hacerse de forma que la parte superior del cepellón quede a nivel del suelo, para evitar podredumbres al nivel del cuello y la desecación de las raíces.

La densidad de plantación depende de la variedad:

Variedad
Nº plantas/ha
Romana
60.000
Iceberg
80.000
Baby
130.000
  
Riego.
Los mejores sistemas de riego, que actualmente se están utilizando para el cultivo de la lechuga son, el riego por goteo (cuando se cultiva en invernadero), y las cintas de exudación (cuando el cultivo se realiza al aire libre), como es el caso del sudeste de España.

Existen otras maneras de regar la lechuga como el riego por gravedad y el riego por aspersión, pero cada vez están más en recesión, aunque el riego por surcos permite incrementar el nitrógeno en un 20%.

Los riegos se darán de manera frecuente y con poca cantidad de agua, procurando que el suelo quede aparentemente seco en la parte superficial, para evitar podredumbres del cuello y de la vegetación que toma contacto con el suelo.

Se recomienda el riego por aspersión en los primeros días post-trasplante, para conseguir que las plantas agarren bien.

 Blanqueo.
Las técnicas de blanqueo empleadas en lechugas de hoja alargada (tipo Romana), consisten en atar el conjunto de hojas con una goma. Actualmente la mayoría de las variedades cultivadas acogollan por sí solas. En en caso de lechugas para hojas sueltas, el blanqueo se realiza con campanas de poliestireno invertidas. Si el cultivo es de invierno-primavera para evitar el espigado, se suele emplear la manta térmica, con el fin de que la planta se desarrolle más rápidamente, no se endurezca y no acumule horas de frío que le hagan subirse a flor. El blanqueo se realiza entre 5 y 7 días antes de la recolección.

Abonado.
 El 60-65% de todos los nutrientes son absorbidos en el periodo de formación del cogollo y éstas se deben de suspender al menos una semana antes de la recolección.

El aporte de estiércol en el cultivo de lechuga se realiza a razón de 3 kg/m2, cuando se trata de un cultivo principal desarrollado de forma independiente de otros. No obstante, cuando se cultiva en invernadero, puede no ser necesaria la estercoladura, si ya se aportó estiércol en los cultivos anteriores.

La lechuga es una planta exigente en abonado potásico, debiendo cuidar los aportes de este elemento, especialmente en épocas de bajas temperaturas; y al consumir más potasio va a absorber más magnesio, por lo que habrá que tenerlo en cuenta a la hora de equilibrar esta posible carencia.

Sin embargo, hay que evitar los excesos de abonado, especialmente el nitrogenado, con objeto de prevenir posibles fitotoxicidades por exceso de sales y conseguir una buena calidad de hoja y una adecuada formación de los cogollos. También se trata de un cultivo bastante exigente en molibdeno durante las primeras fases de desarrollo, por lo que resulta conveniente la aplicación de este elemento vía foliar, tanto de forma preventiva como para la corrección de posibles carencias.

El abonado de fondo puede realizarse a base de complejo 8-15-15, a razón de 50 g/m2. Posteriormente, en sistema de riego tradicional por gravedad, un abonado de cobertera orientativo consistiría en el aporte de unos 10 g/m2 de nitrato amónico. En suelos de carácter ácido, el nitrato amónico puede ser sustituido por nitrato de cal a razón de unos 30 g/m2, aportados en cada riego, sin superar el total de 50 g/m2. También son comunes las aplicaciones de nitrógeno vía foliar, en forma de urea, cuando los riegos son interrumpidos y las necesidades de nitrógeno elevadas.

En fertirrigación, la programación puede realizarse de la siguiente forma:
-En caso necesario, aportar unos 25 g/m2 de abono complejo 8-15-15, como abonado de fondo.
-Tras la plantación, regar diariamente durante 4-5 días sin aporte de abono, para facilitar el enraizamiento de las plantas.
-Durante el primer mes, regar tres veces por semana, aportando las siguientes cantidades de abono en cada riego:
  • 0,30 g/m2 de nitrógeno (N).
  • 0,10 g/m2 de anhídrido fosfórico (P2O5).
  • 0,20 g/m2 de óxido de potasio (K2O).
-Al mes siguiente, regar tres veces por semana, aplicando en cada riego:
  • 0,50 g/m2 de nitrógeno (N).
  • 0,10 g/m2 de anhídrido fosfórico (P2O5).
  • 0,10 g/m2 de óxido de potasio (K2O)

 Malas hierbas.
Siempre que las malas hierbas estén presentes será necesaria su eliminación, pues este cultivo no admite competencia con ellas. Este control debe realizarse de manera integrada, procurando minimizar el impacto ambiental de las operaciones de escarda.
Se debe tener en cuenta en el periodo próximo a la recolección, las malas hierbas pueden sofocar a la lechuga, creando un ambiente propicio al desarrollo de enfermedades que invalida el cultivo. Además las virosis se pueden ver favorecidas por la presencia de algunas malas hierbas.

Las materias activas recomendadas en el cultivo de la lechuga contra malas hierbas anuales son:
MATERIA ACTIVA
DOSIS
PRESENTACIÓN DEL PRODUCTO
Benfluralina 18%
6.50-9.50 l/ha
Concentrado emulsionable
Pendimetalina 33%
3-5 l/ha
Concentrado emulsionable
Propizamida 40%
1.75-3.75 l/ha
Suspensión concentrada

 Recolección.
La madurez está basada en la compactación de la cabeza. Una cabeza compacta es la que requiere de una fuerza manual moderada para ser comprimida, es considerada apta para ser cosechada. Una cabeza muy suelta está inmadura y una muy firme o extremadamente dura es considerada sobremadura. Las cabezas inmaduras y maduras tienen mucho mejor sabor que las sobremaduras y también tienen menos problemas en postcosecha.

Lo más frecuente es el empleo de sistemas de recolección mixtos que racionalizan la recolección a través de los cuales solamente se cortan y acarrean las lechugas en campo, para ser confeccionadas posteriormente en almacén.
ALMACENAMIENTO.
Una temperatura de 0ºC y una humedad relativa mayor del 95% se requiere para optimizar la vida de almacenaje de la lechuga. El enfriamiento por vacío (vacuum cooling) es generalmente utilizado para la lechuga tipo Iceberg, sin embargo el enfriamiento por aire forzado también puede ser usado exitosamente.

El daño por congelamiento puede ocurrir si la lechuga es almacenada a menos de -0.2ºC. La apariencia del daño es un oscurecimiento translúcido o un área embebida en agua, la cual se torna legamosa y se deteriora rápidamente o después de descongelarse.
Durante el almacenamiento pueden producirse pudriciones blandas bacterianas (bacterial soft-rots), causadas por numerosas especies de bacterias, dando lugar a una destrucción legamosa del tejido infectado. Las pudriciones blandas pueden dar pie a infecciones por hongos. La eliminación de las hojas exteriores, enfriamiento rápido y una baja temperatura de almacenamiento reducen el desarrollo de las pudriciones blandas bacterianas.

Los hongos pueden producir una desorganización acuosa de la lechuga (ablandamiento acuoso) causado por Sclerotinia o por Botritis cinerea, estas se distinguen de las pudriciones blandas bacterianas por el desarrollo de esporas negras y grises. La eliminación de las hojas y la baja temperatura también pueden reducir la severidad de estas pudriciones.

VALOR NUTRICIONAL.
La lechuga es una hortaliza pobre en calorías, aunque las hojas exteriores son más ricas en vitamina C que las interiores.

Valor  nutricional de la lechuga en 100 g de sustancia
Carbohidratos (g)
20.1
Proteínas (g)
8.4
Grasas (g)
1.3
Calcio (g)
0.4
Fósforo (mg)
138.9
Vitamina C (mg)
125.7
Hierro (mg)
7.5
Niacina (mg)
1.3
Riboflavina (mg)
0.6
Tiamina (mg)
0.3
Vitamina A (U.I.)
1155
Calorías (cal)
18