martes, 7 de diciembre de 2010

Particularidades del Cultivo


Semillero.
La multiplicación de la lechuga suele hacerse con planta en cepellón obtenida en semillero. Se recomienda el uso de bandejas de poliestireno de 294 alveolos, sembrando en cada alveolo una semilla a 5 mm de profundidad.
Una vez transcurridos 30-40 días después de la siembra, la lechuga será plantada cuando tenga 5-6 hojas verdaderas y una altura de 8 cm., desde el cuello del tallo hasta las puntas de las hojas.
La siembra directa suele realizarse normalmente en E.E.U.U. para la producción de lechuga Iceberg.

Preparación del terreno.
En primer lugar se procederá a la nivelación del terreno, especialmente en el caso de zonas encharcadizas, seguidamente se procederá al asurcado y por último la acaballonadora, formará varios bancos, para marcar la ubicación de las plantas así como realizar pequeños surcos donde alojar la tubería portagoteros.

Se recomienda cultivar lechuga después de leguminosas, cereal o barbecho, no deben cultivarse como precedentes crucíferas o compuestas, manteniendo las parcelas libre de malas hierbas y restos del cultivo anterior. No deberán utilizarse el mismo terreno para más de dos campañas con dos cultivos a lo largo de cuatro años, salvo que se realice una sola plantación por campaña, alternando el resto del año con barbecho, cereales o leguminosas.

La desinfección química del suelo no es recomendable, ya que se trata de un cultivo de ciclo corto y muy sensible a productos químicos, pero si se recomienda utilizar la solarización en verano.

Se recomienda el acolchado durante los meses invernales empleando láminas de polietileno negro o transparente. Además también se emplean en las lechugas de pequeño tamaño y las que no forman cogollos cuyas hojas permanecen muy abiertas, para evitar que se ensucien de tierra procedentes del agua de lluvia.

 Plantación.
La plantación se realiza en caballones o en banquetas a una altura de 25 cm. para que las plantas no estén en contacto con la humedad, además de evitar los ataques producidos por hongos.
La plantación debe hacerse de forma que la parte superior del cepellón quede a nivel del suelo, para evitar podredumbres al nivel del cuello y la desecación de las raíces.

La densidad de plantación depende de la variedad:

Variedad
Nº plantas/ha
Romana
60.000
Iceberg
80.000
Baby
130.000
  
Riego.
Los mejores sistemas de riego, que actualmente se están utilizando para el cultivo de la lechuga son, el riego por goteo (cuando se cultiva en invernadero), y las cintas de exudación (cuando el cultivo se realiza al aire libre), como es el caso del sudeste de España.

Existen otras maneras de regar la lechuga como el riego por gravedad y el riego por aspersión, pero cada vez están más en recesión, aunque el riego por surcos permite incrementar el nitrógeno en un 20%.

Los riegos se darán de manera frecuente y con poca cantidad de agua, procurando que el suelo quede aparentemente seco en la parte superficial, para evitar podredumbres del cuello y de la vegetación que toma contacto con el suelo.

Se recomienda el riego por aspersión en los primeros días post-trasplante, para conseguir que las plantas agarren bien.

 Blanqueo.
Las técnicas de blanqueo empleadas en lechugas de hoja alargada (tipo Romana), consisten en atar el conjunto de hojas con una goma. Actualmente la mayoría de las variedades cultivadas acogollan por sí solas. En en caso de lechugas para hojas sueltas, el blanqueo se realiza con campanas de poliestireno invertidas. Si el cultivo es de invierno-primavera para evitar el espigado, se suele emplear la manta térmica, con el fin de que la planta se desarrolle más rápidamente, no se endurezca y no acumule horas de frío que le hagan subirse a flor. El blanqueo se realiza entre 5 y 7 días antes de la recolección.

Abonado.
 El 60-65% de todos los nutrientes son absorbidos en el periodo de formación del cogollo y éstas se deben de suspender al menos una semana antes de la recolección.

El aporte de estiércol en el cultivo de lechuga se realiza a razón de 3 kg/m2, cuando se trata de un cultivo principal desarrollado de forma independiente de otros. No obstante, cuando se cultiva en invernadero, puede no ser necesaria la estercoladura, si ya se aportó estiércol en los cultivos anteriores.

La lechuga es una planta exigente en abonado potásico, debiendo cuidar los aportes de este elemento, especialmente en épocas de bajas temperaturas; y al consumir más potasio va a absorber más magnesio, por lo que habrá que tenerlo en cuenta a la hora de equilibrar esta posible carencia.

Sin embargo, hay que evitar los excesos de abonado, especialmente el nitrogenado, con objeto de prevenir posibles fitotoxicidades por exceso de sales y conseguir una buena calidad de hoja y una adecuada formación de los cogollos. También se trata de un cultivo bastante exigente en molibdeno durante las primeras fases de desarrollo, por lo que resulta conveniente la aplicación de este elemento vía foliar, tanto de forma preventiva como para la corrección de posibles carencias.

El abonado de fondo puede realizarse a base de complejo 8-15-15, a razón de 50 g/m2. Posteriormente, en sistema de riego tradicional por gravedad, un abonado de cobertera orientativo consistiría en el aporte de unos 10 g/m2 de nitrato amónico. En suelos de carácter ácido, el nitrato amónico puede ser sustituido por nitrato de cal a razón de unos 30 g/m2, aportados en cada riego, sin superar el total de 50 g/m2. También son comunes las aplicaciones de nitrógeno vía foliar, en forma de urea, cuando los riegos son interrumpidos y las necesidades de nitrógeno elevadas.

En fertirrigación, la programación puede realizarse de la siguiente forma:
-En caso necesario, aportar unos 25 g/m2 de abono complejo 8-15-15, como abonado de fondo.
-Tras la plantación, regar diariamente durante 4-5 días sin aporte de abono, para facilitar el enraizamiento de las plantas.
-Durante el primer mes, regar tres veces por semana, aportando las siguientes cantidades de abono en cada riego:
  • 0,30 g/m2 de nitrógeno (N).
  • 0,10 g/m2 de anhídrido fosfórico (P2O5).
  • 0,20 g/m2 de óxido de potasio (K2O).
-Al mes siguiente, regar tres veces por semana, aplicando en cada riego:
  • 0,50 g/m2 de nitrógeno (N).
  • 0,10 g/m2 de anhídrido fosfórico (P2O5).
  • 0,10 g/m2 de óxido de potasio (K2O)

 Malas hierbas.
Siempre que las malas hierbas estén presentes será necesaria su eliminación, pues este cultivo no admite competencia con ellas. Este control debe realizarse de manera integrada, procurando minimizar el impacto ambiental de las operaciones de escarda.
Se debe tener en cuenta en el periodo próximo a la recolección, las malas hierbas pueden sofocar a la lechuga, creando un ambiente propicio al desarrollo de enfermedades que invalida el cultivo. Además las virosis se pueden ver favorecidas por la presencia de algunas malas hierbas.

Las materias activas recomendadas en el cultivo de la lechuga contra malas hierbas anuales son:
MATERIA ACTIVA
DOSIS
PRESENTACIÓN DEL PRODUCTO
Benfluralina 18%
6.50-9.50 l/ha
Concentrado emulsionable
Pendimetalina 33%
3-5 l/ha
Concentrado emulsionable
Propizamida 40%
1.75-3.75 l/ha
Suspensión concentrada

 Recolección.
La madurez está basada en la compactación de la cabeza. Una cabeza compacta es la que requiere de una fuerza manual moderada para ser comprimida, es considerada apta para ser cosechada. Una cabeza muy suelta está inmadura y una muy firme o extremadamente dura es considerada sobremadura. Las cabezas inmaduras y maduras tienen mucho mejor sabor que las sobremaduras y también tienen menos problemas en postcosecha.

Lo más frecuente es el empleo de sistemas de recolección mixtos que racionalizan la recolección a través de los cuales solamente se cortan y acarrean las lechugas en campo, para ser confeccionadas posteriormente en almacén.
ALMACENAMIENTO.
Una temperatura de 0ºC y una humedad relativa mayor del 95% se requiere para optimizar la vida de almacenaje de la lechuga. El enfriamiento por vacío (vacuum cooling) es generalmente utilizado para la lechuga tipo Iceberg, sin embargo el enfriamiento por aire forzado también puede ser usado exitosamente.

El daño por congelamiento puede ocurrir si la lechuga es almacenada a menos de -0.2ºC. La apariencia del daño es un oscurecimiento translúcido o un área embebida en agua, la cual se torna legamosa y se deteriora rápidamente o después de descongelarse.
Durante el almacenamiento pueden producirse pudriciones blandas bacterianas (bacterial soft-rots), causadas por numerosas especies de bacterias, dando lugar a una destrucción legamosa del tejido infectado. Las pudriciones blandas pueden dar pie a infecciones por hongos. La eliminación de las hojas exteriores, enfriamiento rápido y una baja temperatura de almacenamiento reducen el desarrollo de las pudriciones blandas bacterianas.

Los hongos pueden producir una desorganización acuosa de la lechuga (ablandamiento acuoso) causado por Sclerotinia o por Botritis cinerea, estas se distinguen de las pudriciones blandas bacterianas por el desarrollo de esporas negras y grises. La eliminación de las hojas y la baja temperatura también pueden reducir la severidad de estas pudriciones.

VALOR NUTRICIONAL.
La lechuga es una hortaliza pobre en calorías, aunque las hojas exteriores son más ricas en vitamina C que las interiores.

Valor  nutricional de la lechuga en 100 g de sustancia
Carbohidratos (g)
20.1
Proteínas (g)
8.4
Grasas (g)
1.3
Calcio (g)
0.4
Fósforo (mg)
138.9
Vitamina C (mg)
125.7
Hierro (mg)
7.5
Niacina (mg)
1.3
Riboflavina (mg)
0.6
Tiamina (mg)
0.3
Vitamina A (U.I.)
1155
Calorías (cal)
18

3 comentarios:

  1. Lechuga (Riego)

    El riego debe ser periódico, no abundante,más habitual en verano. En todo caso es mejor no encharcar la tierra para evitar la aparición de hongos.Al carecer de un sistema radicular amplio, debe evitarse que el subsuelo se seque.Conviene plantarlas en la parte superior de un caballón para evitar que el agua de riego moje las hojas.Se puede regar mediante goteo o por inundación de los caballones. La distancia entre filas se debe situar a unos 50 cm y la distancia entre plantas ha de ser de unos 30 cm. Es muy sensible al agua salada, que reduce mucho la producción.

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  2. La lechuga (Ambiente y Exposicion)

    Requiere una exposición soleada o de semisombra. Prefiere un clima frío, aunque hay variedades que se adaptan bien a climas cálidos, con tal que dispongan de humedad. Soportan muy bien temperaturas hasta -06. Un excesivo calor produce un espigamiento demasiado temprano o la aparición de quemaduras en las hojas. Un exceso de frío conlleva al enrojecimiento de las hojas.

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  3. es necesario que los comentarios sean para solamente dudas y comentarios acerca de dudas sobre el blogger...... toda la informacion sobre el contenido va dentro como entradas de cada participante... atte su profesor

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